jueves, 2 de octubre de 2014

“Romance del enamorado y la muerte”, Adolfo Osta

Este desesperado romance medieval está magníficamente recitado por Adolfo Osta, cantautor e intérprete español de música tradicional española residente en Barcelona. Licenciado en Filología Hispánica por la UB y buen conocedor del cancinonero tradicional, estudió también guitarra clásica, laúd, solfeo y canto.

Además de a este romance anónimo, ha puesto voz y música a varios poemas de Lorca y Paco Ibáñez, a temas de trovadores galaico-portugueses y a un buen repertorio de lírica tradicional.

lunes, 29 de septiembre de 2014

Desde este mar en calma

Desde este mar en calma
Que me colma de ausencias,
Desde esta orilla triste
de marchitos recuerdos.
Ayer me trae perfumes
De rosas ya muertas
Que el viento se lleva
Lejos, muy lejos,
Donde las lágrimas son lágrimas de hielo,
Donde las alas son alas de piedra,
Y este corazón mío de sangre ya fría
No tiembla: murmura
Palabras vacías.
Palabras sin eco que estallan en versos,
Que rompen las hojas, vacían tinteros,
Y encuentran en nada un sentido sincero,
De letras vacías, poemas sin cuerpo.

                                                        Anónimo

miércoles, 24 de septiembre de 2014

"La saeta", Antonio Machado

Este es otro de los poemas más conocidos de Machado, cantado también por Manuel Serrat:


   

¡Oh, la saeta, el cantar
al Cristo de los gitanos,
siempre con sangre en las manos,
siempre por desenclavar!
¡Cantar del pueblo andaluz,
que todas las primaveras
anda pidiendo escaleras
para subir a la cruz!
¡Cantar de la tierra mía,
que echa flores
al Jesús de la agonía,
y es la fe de mis mayores!
¡Oh, no eres tú mi cantar!
¡No puedo cantar, ni quiero
a ese Jesús del madero,
sino al que anduvo en el mar!

"Caminante no hay camino", Antonio Machado

Hoy os presentamos unos de los versos más famosos, conocidas y cantados de Antonio Machado. Forman parte de "Proverbios y Cantares" del libro Campos de Castilla, una de las obras más conocidas del poeta concebida como una recopilación de diversos poemas en los que Machado abandona la línea intimista y se adentra en la geografía castellana y andaluza.

Los "Proverbios y cantares" reflejan una reflexión filosófica de la vida. Son meditaciones sobre los enigmas del hombre y el mundo.

En este poema, cuando dice "Caminante, son tus huellas el camino, y nada más ..." es probablemente una convicción de que solo importa lo que se vive, y se vive si se decide a andar el camino; lo imaginado o deseado poco importa. El poema invita a descubrir nuevos horizontes en la vida, a encontrar nuevos paisajes, nuevas gentes, nuevos lugares, nuevas reflexiones. Y una vez recorrido el camino ya solo quedará el recuredo de lo vivido ("estelas en la mar").

Además hace una doble reflexión; el recuerdo ha de servir para no volver a cometer los mismos errores; y poco más, porque "nunca se ha de volver a pisar" los caminos ya recorridos, pues habrán perdido la emoción de la primera vez.

En resumen Machado nos dice que cada persona ha de recorrer su camino, que hay que decidirse a recorrerlo, aun con la incertidumbre de lo que habrá, y que no se ha de volver a recorrer caminos ya vivenciados. Y en todo caso caso quedará al final de nuestros dias los recuerdos de lo vivido ("estelas en la mar")

La versión que os presentamos es la versión cantada por Joan Manuel Serrat.


 
Todo pasa y todo queda,
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos,
caminos sobre el mar.

Nunca persequí la gloria,
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles,
como pompas de jabón.

Me gusta verlos pintarse
de sol y grana, volar
bajo el cielo azul, temblar
súbitamente y quebrarse...

Nunca perseguí la gloria.

Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.

Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.

Caminante no hay camino
sino estelas en la mar...

Hace algún tiempo en ese lugar
donde hoy los bosques se visten de espinos
se oyó la voz de un poeta gritar
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso...

Murió el poeta lejos del hogar.
Le cubre el polvo de un país vecino.
Al alejarse le vieron llorar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso...

Cuando el jilguero no puede cantar.
Cuando el poeta es un peregrino,
cuando de nada nos sirve rezar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."

Golpe a golpe, verso a verso.


viernes, 29 de agosto de 2014

“Romance de la luna”, Federico García Lorca

 

Federico García Lorca (Fuente Vaqueros,1 Granada, 5 de junio de 1898 – entre Víznar y Alfacar, Granada, 18 de agosto de 1936)2 fue un poeta, dramaturgo y prosista español, también conocido por su destreza en muchas otras artes. Adscrito a la llamada Generación del 27, es el poeta de mayor influencia y popularidad de la literatura española del siglo XX. Como dramaturgo, se le considera una de las cimas del teatro español del siglo XX, junto conValle-Inclán y Buero Vallejo.
Murió fusilado tras la sublevación militar que dio origen a la
Guerra Civil Española.

El universo lorquiano se define por un palpable sistematismo: la poesía, el drama y la prosa se alimentan de obsesiones —amor, deseo, esterilidad— y de claves estilísticas constantes. La variedad de formas y tonalidades nunca atenta contra esa unidad cuya cuestión central es la frustración.

Los símbolos: de acuerdo con su gusto por los elementos tradicionales, Lorca utiliza frecuentemente símbolos en su poesía. Se refieren muy frecuentemente a la muerte aunque, dependiendo del contexto, los matices varían bastante. Son símbolos centrales en Lorca:

  • La luna: es el símbolo más frecuente en Lorca. Su significación más frecuente es la de muerte, pero también puede simbolizar el erotismo, la fecundidad, la esterilidad o la belleza.26
  • El agua: cuando corre, es símbolo de vitalidad. Cuando está estancada, representa la muerte.
  • La sangre: representa la vida y, derramada, es la muerte. Simboliza también lo fecundo, lo sexual.
  • El caballo (y su jinete): está muy presente en toda su obra, portando siempre valores de muerte, aunque también representa la vida y el erotismo masculino.
  • El toro: García Lorca era aficionado a los toros; según sus palabras : "Creo que los toros es la fiesta más culta que hay en el mundo. Es el drama puro en que el cual el español derrama sus mejores lágrimas y su bilis . Es el único sitio a donde se va con la seguridad de ver la muerte rodeada de la más deslumbradora belleza (...)27 "
  • Las hierbas: su valor dominante, aunque no único, es el de ser símbolos de la muerte.
  • Los metales: también su valor dominante es la muerte. Los metales aparecen bajo la forma de armas blancas, que conllevan siempre tragedia.

La metáfora: es el procedimiento retórico central de su estilo. Bajo la influencia de Góngora, Lorca maneja metáforas muy arriesgadas: la distancia entre el término real y el imaginario es considerable. En ocasiones, usa directamente la metáfora pura. Sin embargo, a diferencia de Góngora, Lorca es un poeta conceptista, en el sentido de que su poesía se caracteriza por una gran condensación expresiva y de contenidos, además de frecuentes elipsis. Las metáforas lorquianas relacionan elementos opuestos de la realidad, transmiten efectos sensoriales entremezclados, etc.

El neopopularismo: aunque Lorca asimila sin problemas las novedades literarias, su obra está plagada de elementos tradicionales que, por lo demás, demuestran su inmensa cultura literaria. La música y los cantos tradicionales son presencias constantes en su poesía. No obstante, desde un punto de vista formal no es un poeta que muestre una gran variedad de formas tradicionales; sin embargo, profundiza en las constantes del espíritu tradicional de su tierra y de la gente: el desgarro amoroso, la valentía, la melancolía y la pasión.

Aunque es difícil establecer épocas en la poética de Lorca, algunos críticos diferencian dos etapas: una de juventud y otra de plenitud.

- Época de juventud: Aquí se incluyen sus primeros escritos: Impresiones y paisajes (en prosa, aunque sin embargo muestra procedimientos característicos del lenguaje poético) y Libro de poemas (escrito bajo el influjo de Rubén Darío, Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez); en este poema García Lorca proyecta un amor sin esperanza, abocado a la tristeza.

- Época de plenitud: Comienza con el Poema del cante jondo (1921) que, mediante la unidad temática, formal, conceptual y la expresión de los sentimientos, debida en parte a su inspiración folclórica, describe la lírica neopopularista de la Generación del 27. En Primeras canciones (1936) y Canciones (1927) emplea las mismas formas: la canción y el romance. Los temas del tiempo y la muerte se enmarcan en el alba, la noche, la ciudad andaluza y los paisajes lunares. La muerte y la incompatibilidad moral del mundo gitano con la sociedad burguesa son los dos grandes temas del Romancero gitano. Destacan los procedimientos habituales de poesía de origen popular, y la influencia del compositor Manuel de Falla. No se trata de una obra folclórica; está basada en los tópicos con que se asocia lo gitano y andaluz. Lorca eleva al personaje gitano al rango de mito literario, como después hará también con el negro y el judío en Poeta en Nueva York. En el Romancero gitano emplea el romance, en sus variantes de novelesco, lírico y dramático; su lenguaje es una fusión de lo popular y lo culto.
Lorca escribió Poeta en Nueva York a partir de su experiencia en EE. UU., donde vivió entre 1929 y 1930. Para Lorca la civilización moderna y la naturaleza son incompatibles. Su visión de
Nueva York es de pesadilla y desolación, propia de un mal sueño. Para expresar la angustia y el ansia de comunicación que lo embargan, emplea las imágenes visionarias del lenguaje surrealista. Su libertad expresiva es máxima, aunque junto al verso libre se advierte el uso del versomedido (octosílabo, endecasílabo y alejandrino).
Llanto por la muerte de Ignacio Sánchez Mejías (1935) es una elegía de incontenible dolor y emoción que actúa de homenaje al torero sevillano que tanto apoyó a los poetas de la
Generación del 27.

Lorca siempre ha contado con el respeto y admiración incondicional de los poetas de generaciones posteriores a la Guerra Civil, aunque para muchos ha sido considerado un poeta maldito .

El poema que presentamos a continuación forma parte del Romancero gitano y es un claro ejemplo de la personalísima simbiosis entre tradición y vanguardia que caracteriza al poeta andaluz. Así, valiéndose de los elementos de un molde claramente arraigado en nuestra lírica –el romance –, los reelabora y recrea logrando encarnar de manera sugerente algunos de los temas, obsesiones y símbolos más representativos de su obra.

En síntesis, el poema nos cuenta una sencilla y conmovedora historia: la muerte de un niño gitano en una noche de luna llena. Ahora bien, en García Lorca es casi una constante la fusión entre realidad y mito, de modo que se puede decir que la realidad se transustancia en el mito de una forma original y atractiva. De esta manera, la anécdota se diluye en un confuso y abigarrado mundo de sensaciones que enlazan con lo primigenio y eterno: el ancestral temor ante la muerte. Lo que queda tras la lectura es, fundamentalmente, la impresión de lo fatal.

 

Autores del montaje: Natàlia, Gerard Martínez, Marc Dueñas
Recitación: Marc Dueñas
Música: ????

“Anoche cuando dormía”, Antonio Machado


Antonio Machado fue un poeta español, el más joven representante de la Generación del 98. Su obra inicial, de corte modernista, evolucionó hacia un intimismo simbolista con rasgos románticos, que maduró en una poesía de compromiso humano, de una parte, y de contemplación casi taoísta de la existencia, por otra; una síntesis que en la voz de Machado se hace eco de la sabiduría popular más ancestral. Dicho en palabras de Gerardo Diego, «hablaba en verso y vivía en poesía. Fue uno de los distinguidos alumnos de la ILE, con cuyos idearios estuvo siempre comprometido. Murió en el exilio en la agonía de la Segunda República Española.

Su obra poética se abrió con Soledades, escrito entre 1901 y 1902, y casi reescrito en Soledades. Galerías. Otros poemas, que publicó en octubre de 1907.

Durante su estancia en Soria, Machado escribió su libro más noventayochista, Campos de Castilla, publicado por la editorial "Renacimiento" en 1912. Sus protagonistas son las tierras castellanas y los hombres que las habitan. Le siguió la primera edición de sus Poesías completas (1917), en la que se incrementan los libros anteriores con nuevos poemas y se añaden los poemas escritos en Baeza tras la muerte de Leonor, los populares «Proverbios y cantares» —"poemas breves, de carácter reflexivo y sentencioso"—, y una colección de textos de crítica social, dibujando la España de aquel momento. En 1924 publicó las Nuevas canciones, recuperando materiales escritos en Baeza y aún en Soria, y mezclando ejemplos de sentenciosa poesía gnómica y análisis en torno al hecho de la creación poética, con paisajes soñados, algunas galerías y los primeros sonetos que se le conocen.

El poema que presentamos a continuación pertenece a Soledades. Galerías. Otros poemas, recopilación de 1907 que amplía el libro Soledades, publicado en 1903. En los poemas añadidos a la segunda versión, Machado se aleja del Modernismo melancólico que impregnaba su primera obra para perfeccionar la estética de la introspección. Así, la voz poética recorre las galerías interiores del poeta para expresar, con inusitada densidad simbólica, la esencia de su ser. El limonar florido, el cipresal del huerto, el prado verde, el sol, el agua, el iris, son símbolos que jalonan el tránsito metafísico del poeta en este libro.

El tema de la composición es la desolación que procura la pasajera emoción del alma en su encuentro místico con Dios. El poema nos brinda un sentimiento candoroso, reconfortante, más destrozado por el carácter efímero del sueño.

 

Autoras del montaje: Aurora Tomás y Paula Fernández
Recitación: Aurora Tomás y Paula Fernández
Música: ????

domingo, 24 de agosto de 2014

“Aquí te amo”, Pablo Neruda

 

El poema de Pablo Neruda que presentamos hoy fue escrito por el poeta chileno a los 20 años por lo que podemos percibir en él la influencia del Romanticismo. Está escrito desde una postura intimista y confidencial, la forma de enfrentarse al concepto poético como si estuviera enfrente, habla desde el “yo lírico” hacia el “tú” amado, la necesidad de conexión íntima. Notamos la libertad de la estructura métrica.

Esta obra literaria forma parte de la colección de Veinte poemas de amor. En varios de sus poemas Pablo Neruda enfoca el amor como el tema principal. En este poema el amor no es nada más que un deseo inalcanzable. Neruda expresa tal intangibilidad a través de un tono oscuro y melancólico. El amor del narrador hacia una mujer se demuestra por medio de símbolos claroscuros. Todo el poema expresa el dolor y el deseo del gran amor del narrador. En general, este poema es una clara ejemplificación de Neruda empleando diversos recursos literarios que le dan un valor profundo al tema principal: el amor herido.

Pablo Neruda es considerado como el mejor poeta chileno. Algo que caracteriza su escritura es la gran mención de la naturaleza. Neruda creció en una zona rural donde el trabajo en el campo era común. Esta interacción con la naturaleza la transmite en su colección de Veinte poemas de amor. En “Aquí te amo” alude a al mar, la luna, pinos, una ave y barcos. Además de ser un poeta, Pablo Neruda fue un ciudadano políticamente activo en su país. Fue cónsul en diversos países europeos, uno de ellos España, donde conoció a grandes escritores como García Lorca y Vicente Aleixandre.

El amor de la mujer es inalcanzable. Neruda crea un ambiente romántico por medio del claroscuro. El contraste entre “los oscuros pinos” y “la luna fosforescente,” “una vela” y “una cruz negra” demuestra la inestabilidad del narrador a causa de la ausencia del amor. Los oscuros pinos representan una vida sin motivo. Los pinos usualmente representan vida; el hecho de que Neruda los catalogue como “oscuros” le da un valor minúsculo a la existencia del narrador. Lu luna simboliza a la mujer. La “luna fosforescente” sobre “las aguas errantes” significa que la ausencia de la mujer hace que el narrador crezca de forma errante. Su vida no tiene valor si ella no está presente.

Autoras del montaje:
Recitación:
Música:

“Escondido en los muros”, Luis Cernuda

 

“Si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido”

Luis Cernuda fue un destacado poeta y crítico literario español, miembro de la Generación del 27.

Su educación fue rígida e intransigente debido al carácter y a la condición militar de su padre, que se retiró con el grado de coronel. Aún así, nunca negó su condición homosexual, factor que le hizo ser considerado en su patria un «raro» y rebelde, dada la mentalidad poco abierta de la España de entonces, «un país donde todo nace muerto, vive muerto y muere muerto», como dirá en Desolación de la Quimera. La consciencia de su aislamiento se expresa en una de sus imágenes más conocidas: Cernuda se ve a sí mismo «como naipe cuya baraja se ha perdido». 

La poesía cernudiana es una poesía de la meditación, y consta de cuatro etapas, según Octavio Paz: los años de aprendizaje, la juventud, la madurez y el comienzo de la vejez.

  • A la etapa inicial pertenecen las primeras poesías, publicadas en 1927 con el título de Perfil del aire —que muestran a un poeta elegante en su contemplación elegíaca del mundo— y Égloga, elegía, oda, escrito entre 1927 y 1928, que rinde homenaje a la tradición clásica a la vez que toca algunos temas muy cernudianos: amor y eros en especial.
  • Comienza el ciclo de la juventud con Un río, un amor y Los placeres prohibidos, escritos entre 1929 y 1931. Esos dos libros revelan la adhesión de Cernuda al surrealismo. Aunque el clasicista que siempre hubo en él atempera muchas veces la ruptura formal, lo esencial de esos poemarios es su espíritu de rebeldía contra el orden establecido. En Los placeres prohibidos la rebelión crece con la abierta reivindicación de la homosexualidad. Donde habite el olvido (1934) es un libro neorromántico, «superbecqueriano», que desarrolla una elegía amorosa. Invocaciones, de 1934–1935, presenta al neorromántico dilatándose en amplios poemas que celebran las glorias del mundo y exaltan la misión del poeta.
  • El período de madurez arranca con Las nubes (1940 y 1943), uno de los más bellos libros de poesía sobre la Guerra Civil, donde lo elegíaco alcanza su plenitud. Bajo el estímulo de la lírica inglesa, incluye monólogos dramáticos, como «La adoración de los magos». Prolonga tono y estilo en Como quien espera el alba (1947). Obsesionado con sus recuerdos sevillanos, elabora en prosa Ocnos (1.ª ed. en 1942, luego ampliada: 1949 y 1963), esencial para entender su mitología del Edén perdido.
  • El periodo de exilio se desarrolla en México, donde compondría Variaciones sobre tema mexicano (1952), Vivir sin estar viviendo (1944–1949) y Con las horas contadas, de 1950–1956, que en ediciones posteriores incorporará Poemas para un cuerpo (Málaga, 1957). Es perceptible la sustitución de la anterior musicalidad elegante, garcilasiana, por un ritmo seco, duro, y por la renuncia a toda ornamentación en favor del concepto. Este estilo alcanza su plenitud enDesolación de la Quimera (1962).

Para Cernuda, el respeto a la tradición literaria y la aportación de originalidad en su obra deben ir en perfecto equilibrio. Para él, el respeto a la tradición es algo fundamental, pero no entiende esa tradición solamente como el respeto a la obra de autores españoles, sino que abarca el conjunto de la literatura europea desde Homero. Entre las presencias de la tradición que más claramente se ven en sus poemas encontramos:

  1. Garcilaso. Tanto por su métrica (como se ve en el libro Égloga. Elegía. Oda), como por sus temas (el amor, la visión idealizada de la naturaleza y la presencia de la mitología clásica).
  2. Bécquer, y los poetas que inician el Simbolismo (Baudelaire, Paul Verlaine, Paul Valéry, Mallarmé, Friedrich Hölderlin), que le aportan el concepto del poeta como un ser sobrenatural que tiene la capacidad de percibir lo que otros no pueden.
  3. Los poetas platónicos (Fray Luis de León, T.S. Eliot), le aportan la visión de la naturaleza como un mundo de orden y paz, frente al caos humano.
  4. En Historial de un libro señala asimismo el influjo que ejercieron sobre él la poesía de los poetas metafísicos ingleses y la de Hölderlin.

Junto a todas estas presencias de la tradición cultural europea, Cernuda también tendrá en cuenta la obra de sus contemporáneos:

  1. Juan Ramón Jiménez, por la visión subjetiva de la realidad y por la idea de que la verdadera literatura es aquella que se dirige a la esencia de las cosas, eliminando la superficialidad.
  2. Los poetas del 27 le enseñan a enfrentarse a la obra literaria desde la perspectiva del Surrealismo.

El núcleo temático de la obra de Cernuda es la antítesis entre la realidad y el deseo, hecho que explica que a partir de 1936 titulara el conjunto de su poesía con esta oposición. Esta antítesis nace, sin duda, de las peculiares circunstancias vitales del poeta sevillano, pero entronca perfectamente con lo que en los poetas románticos y simbolistas era la colisión entre la libertad individual y la sociedad burguesa, además de ser un tema característico de la poesía del siglo XX, como lo demuestra su aparición en poemas de autores muy variados, desde Antonio Machado, a Federico García Lorca, pasando por Rafael Alberti.

El tema de la realidad frente al deseo podemos concretarlo en la obra de Cernuda en una serie de motivos temáticos recurrentes:

  1. Soledad, aislamiento, marginación y sentimiento de la diferencia.
  2. Deseo de encontrar un mundo habitable que no reprima ni ataque al individuo que se siente y se sabe diferente. En el intento por encontrar ese mundo habitable deseado, a veces el poeta se dirige al pasado, a la niñez, con lo que enlazamos con el tema de los «paraísos perdidos», tan característico de la literatura contemporánea.
  3. Deseo de encontrar la belleza perfecta, que no esté ensuciada por la realidad, por la materialidad.
  4. El amor, como el gran tema cernudiano. Este motivo adopta distintos planteamientos a lo largo de su obra que podemos reducir a cuatro momentos:
    • Un amor no disfrutado, pero presentido. Entendido más como experiencia literaria, leída. Es lo que encontramos, principalmente, en el libro Los placeres prohibidos.
    • La experiencia amorosa marcada por la insatisfacción, por el dolor y el fracaso, por la incomprensión. Lo podemos encontrar, principalmente, en el libro Donde habite el olvido.
    • El amor como experiencia feliz, exaltada, pero marcada por la brevedad. Así lo leemos en los Poemas del cuerpo.
    • El tiempo y su discurrir es otro de los grandes temas del poeta sevillano. Vinculados a este motivo temático encontraremos el deseo de juventud eterna, marcada por las experiencias amorosas, por la belleza y por la fuerza de espíritu que le permite mantener una actitud rebelde frente al mundo que le oprime; la nostalgia de la infancia, asociada a la ingenuidad y, por ello, a la felicidad y el deseo de eternidad, de llegar a fundirse con la Naturaleza en un universo perfectamente ordenado.
  5. La naturaleza. Es clara la oposición que se produce en los poemas de Cernuda entre el mundo burgués, contra el que el poeta reacciona de maneras diversas, y el mundo natural, considerado como un paraíso en el que el artista puede vivir en perfecta armonía. Ese mundo social burgués viene marcado por el caos, es la realidad, y frente a él, el orden natural, el deseo. Esa naturaleza cernudiana viene dominada por la espontaneidad y por la proyección libre de los sentimientos y los instintos que en el ámbito burgués deben ser reprimidos.

A continuación recitaremos “Escondido en los muros”, perteneciente a sus primeras poesías:

Autores del montaje: Andrea Clemente, Paula Corbalán, Noelia Maese
Recitación: Andrea Clemente, Paula Corbalán, Noelia Maese
Música: Canon en Re mayor, Johann Pachelbel

sábado, 23 de agosto de 2014

“Los cielos son iguales”, Pedro Salinas

 

"He tenido siempre un deseo de amor tan vivo, que por eso he sido poeta"

Pedro Salinas fue uno de los principales representantes de la Generación del 27 y ha sido reconocido por muchos críticos como el "poeta del amor" del 27. Pocos igualaron la sutileza con que supo ahondar en el sentimiento amoroso. Trasciende las puras anécdotas para encontrar la clave más gozosa de las relaciones sentimentales; desde una posición claramente antirromántica, el amor es para él, en vez de sufrimiento, una prodigiosa fuerza que da plenitud a la vida y sentido al mundo, enriquecimiento del propio ser y enriquecimiento de la persona amada, un acontecimiento jubiloso: «¡Qué alegría vivir / sintiéndose vivido...!», exclama. El amor hace amar la vida, decir que sí al mundo: «¡Sí, todo con exceso: — la luz, la vida, el mar!». Sólo en algunos pasajes de Razón de amor aparece a veces un tono más grave, en ciertos poemas que hablan de los límites del amor, de su posible e inevitable final.

Dentro de su trayectoria poética se suelen distinguir tres etapas:

  • La etapa inicial (19231932) está marcada por la influencia de la poesía pura de Juan Ramón Jiménez y los ecos de las vanguardias futurista y ultraísta. La idea de la depuración y perfección poéticas y el protagonismo que van cobrando en ella los temas amorosos perfilan lo que será su etapa de plenitud.
  • La etapa de plenitud (19331939) está formada por la trilogía amorosa:
La voz a ti debida (título tomado de un verso de la Égloga tercera de Garcilaso de la Vega), (1933) presenta la historia de una pasión amorosa, desde su nacimiento hasta el final.
Razón de amor (1936) examina lo que queda del amor cuando éste acaba. La pasión y el dolor de la separación son, por lo tanto, los temas centrales del libro.
Largo lamento (evocando un verso de Gustavo Adolfo Bécquer)(1939) continúa la línea marcada en las obras anteriores.

Los tres libros están escritos en heptasílabos y octosílabos «blancos» o sin rima, a los que van añadiéndose endecasílabos hasta que la proporción se invierte en el último libro. Se abusa con frecuencia de la enumeración y existe cierto tono conceptista: «Todo quiere ser dos», «Serás, amor, un largo adiós que no se acaba», etc.

  • La etapa del exilio (19401951). De esta época se suele destacar su impresionante poema «Cero», suscitado por la destrucción que provocan las armas atómicas.

Nosotros nos centraremos en su poemario La voz a ti debida, que da nombre a este blog y al que pertenece el poema que recitaremos a continuación:

La voz a ti debida (1933) es el primer libro de la trilogía de temática amorosa que ya hemos mencionado.Este ciclo es la expresión de un proceso amoroso que va desde el encuentro, el intento del enamorado por descubrir la esencia de la mujer amada en La voz a ti debida, el hallazgo de la pareja y despedida parcial en Razón de amor, y el final doloroso tras un reencuentro imposible en Largo lamento.

A partir de esta obra Salinas define su concepto del amor entendido como un proceso de autoconocimiento del yo a partir del tú. Las raíces literarias de dicha concepción del amor se encuentran en el petrarquismo, en Garcilaso de la Vega y en el idealismo platónico. Cabe señalar también la influencia de Gustavo Adolfo Bécquer y la dimensión existencialista que posee este poemario.

El origen de La voz a ti debida, y de la trilogía en conjunto, se halla en la historia de amor vivida por el poeta con la profesora norteamericana Katherine R. Whitmore, a quien conoció en Santander en un curso de verano de la Universidad Internacional en 1932. Durante muchos años la crítica literaria había considerado que la mujer amada, objeto y destinataria de los poemas que componen la trilogía formada por La voz a ti debida, Razón de amor y Largo lamento, carecía de existencia real. Esta opinión quedó totalmente desmentida con la publicación en 2002 de las cartas que Pedro Salinas escribió a Katherine R. Whitmore entre 1932 y 1947.

El tema central de La voz a ti debida es el amor a una mujer, a quien no se nombra, expresado desde la reflexión introspectiva acerca de este sentimiento y de sus múltiples matices. Puede hablarse de una especie de filosofía del amor, que en determinados momentos roza el platonismo y en otros se halla en el extremo opuesto, con la atención puesta en lo físico y sensorial. Destacan los demorados análisis de los sentimientos y la introspección psicológica de raíz petrarquista.

Otros temas estrechamente vinculados a la expresión de la vivencia amorosa son:

  • Imagen de la mujer amada: La mujer amada es como una idea presentida al modo de las ideas platónicas. Aparece como una fuerza creadora, con la que nacen la realidad y la belleza del mundo, todo lo prodigioso. La vida es lo que ella toca o mira. Incluso el propio amante cobra existencia y personalidad desde el momento en que ella lo elige entre todos. La amada es presentada como alguien distante, leve, luminosa, fuera de la realidad cotidiana y prosaica, al margen del espacio y del tiempo en una especie de dimensión divina a través de imágenes poéticas y notas estilísticas referidas a la idea de ascensión luminosa y etérea.
  • Búsqueda de la esencia de la mujer amada: Salinas busca la esencialidad de la mujer amada, del ser que se esconde detrás de la apariencia, buscando algo que no sea un espectro o una sombra.
  • El dolor como última forma del amor.

El poema que os presentamos a continuación pertenece a La Voz a ti debida:

Autoras del montaje: Georgina Cámpiz, Ruth González, Paula Moral
Recitación: Georgina Cámpiz, Ruth González, Paula Moral
Música: ????